Jarabe de aloe vera: Si bien el uso externo de esta planta es lo más habitual, también puede consumirse de forma interna. No dudes en preparar el jarabe que se propone en el artículo.
Aloe vera para quemaduras: Sin duda alguna, el aloe vera puede ir de maravillas para aquellos que se pasaron de sol en un día de verano o para quienes apoyaron la mano en una sartén caliente. Precaución: no usar en quemaduras profundas y consultar de inmediato a un especialista.
Aloe para labios secos: La humectación de la sábila no tiene límites. Para aquellos que sufren de labios secos, no tienen más que probar la receta.
Remedio de aloe vera para el hígado: Como se señalaba, el aloe puede ser consumido de forma interna y ayudar mucho a la digestión. De hecho, se puede emplear para el hígado sin problema alguno.
Aloe vera para las hemorroides: Combinado con manzanilla, esta planta puede también funcionar contra las almorranas, en un fácil remedio casero para aplicar externamente y desinflamar la zona dolorida.
Aloe vera para la sequedad vaginal: Aunque parezca mentira, el aloe vera o sábila también va de maravillas para esa clase de problemas íntimos. Siguiendo el enlace encontrarás una interesante historia que nos ha hecho llegar una usuaria.
Aloe vera para el cabello: Las capacidades humectantes del aloe vera se aplican con total tranquilidad al cabello. No dejes de probar las recetas que encontrarás en el anterior enlace
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